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Este evocador arco es muy conocido en la provincia y es el resto superviviente de una antigua iglesia, la del poblado de dicho nombre que desapareció hace siglos. El que se mantenga en pie, en un paraje muy atractivo o el que se existan sepulturas en su entorno, hace que muchas personas lo visiten cada año.
La pisada del diablo
En el margen izquierdo del camino que une Cardeñosa con el cementerio, se localiza esta roca. Es en este afloramiento donde también se ven tres marcas, las conocidas marcas del diablo que dejó el diablo una reacción furibunda. Si te fijas, se pueden ver donde clavó sus garras
Marcando este lugar se localiza una cruz que fue reconstruida a partir de fragmentos de otros cruceros y se desplazó el resultado final a su actual ubicación.
La cueva de la Fons Griega
El terreno granítico, de berrocales y bolos, no es propio para que existan cuevas pero si se superponen grandes bloques que conforman espacios o covachos. En el paraje de la Fons Griega existió una construcción y, muy cerca, uno de estos abrigos y, en torno a él, toda una serie de leyendas y mitos como el de los Coínes, unos seres que encontraban aquí refugio y que salían del mismo para robar. Esta especie de duendes eran temidos y algunos cuentan que aún se les puede ver de noche merodeando por el campo…
Un monte mediterráneo en perfecto estado
Aparte del patrimonio cultural, el patrimonio natural tiene una similar importancia ya que el término cuenta con amplios encinares siendo especialmente notables aquellos que circundan el curso del río Adaja. Estas zonas boscosas cuentan con diversas calificaciones como áreas ZEPA (Zonas de Especial Protección Ambiental) y, concretamente, están incluidas en las áreas de conservación del Águila Imperial.
Los encinares de Ávila se extienden al norte de la capital formando una de las masas de bosque mediterráneo en mejor estado de conservación de la región, fiel reflejo de los grandes encinares y dehesas que antaño caracterizaron el tupido paisaje del piedemonte del Sistema Central.
Estos bosques son atravesados por el río Adaja antes de alcanzar las tierras llanas de La Moraña. El paisaje de los encinares ha sufrido notables modificaciones con la construcción del embalse situado en las proximidades del yacimiento de Las Cogotas.
FLORA
La estructura de estos encinares difiere según su uso agrícola. Por un lado, existen zonas que han sido aprovechadas como dehesas para el ganado vacuno y que presentan una configuración de monte alto; otras áreas, por el contrario se han destinado fundamentalmente a cotos de caza, manteniendo zonas de matorral muy espeso en el que junto a las encinas crecen especies como las jaras y las retamas. También aparecen algunos pinos y, en las vaguadas y arroyos, chopos, sauces, fresnos y rosales silvestres.
FAUNA
La gran extensión de los encinares y su relativo buen estado de conservación han permitido la existencia de interesantes poblaciones faunísticas a las mismas puertas de la ciudad amurallada. Destaca la presencia de un gran número de pequeñas y medianas rapaces.
Otras especies más escasas como el águila real, el águila imperial y el búho real sobrevuelan habitualmente estos parajes.
FLORA
FAUNA
ROCA